sábado, 27 de marzo de 2010

El arte esta en el detalle...

Si le quitáramos la etiqueta a una botella de Coca-Cola, aún podríamos reconocerla. Es que el diseño del envase nos ayuda a identificar el producto. Y la empresa de gaseosas lo sabía. No por gusto contrató a Raymond Loewy, uno de los más famosos diseñadores industriales de Estados Unidos.

En el Perú, el concepto del diseño de producto ha evolucionado a trazo lento. Hace más de 10 años, algunos diseñadores industriales peruanos desarrollaron carrocerías para ómnibus y mototaxis, pero eran la excepción. No había mucho trabajo para ellos porque, en ese tiempo las empresas grandes peruanas no veían la necesidad de crear (porque siempre se podía "imitar" lo foráneo).

Sin embargo, el panorama está cambiando. Según Fernando Pérez, coordinador de la especialidad de Diseño Industrial de la Universidad Católica, el campo de acción del diseñador está "en un mayor porcentaje (70%) en el diseño de mobiliario, tanto doméstico como institucional". Y esto es porque, a mayor oferta de productos, el cliente ya no solo se conforma con un buen precio. Rolando Arellano, experto en administración de empresas y márketing, indica en su libro "Comportamiento del consumidor y márketing", que el consumidor se enfrenta usualmente a cuatro tipos diferentes de riesgos antes de comprar: de funcionamiento (si el producto cumple la función), físico (si lo pone en peligro ), psicológico (si le cambia la manera de pensar) y social (la imagen que el producto proyecta en la sociedad)

SEAMOS DIFERENTES

Álvaro Chang-Say conoció la madera desde "toda la vida" porque sus padres, arquitectos, tenían una empresa de diseño. Sin embargo, él quiso hacer algo propio y luego de estudiar diseño industrial, creó en 1996, su propio negocio: Deuno. Al principio, diseñaba y elaboraba muebles en serie para casas y empresas, pero pronto se agotó de hacer ese tipo de producción y desarrolló una línea llamada Toqapu. "Retomé con fuerza el diseño y decidí hacer algo que recogiese una parte de nuestra cultura", cuenta. Entonces, comenzó a hacer sillas, mesas y portadiscos con iconografías geométricas que "muestren algo de nuestra identidad".

Ahora, el 70% de sus clientes le piden hacer muebles para sus casas, ha sacado una línea de diseño contemporáneo y tiene miras en exportar. Por eso, ha llevado algunas de sus propuestas a ferias de Nueva York y Madrid. Sin embargo, a pesar de que existe mucho material cultural para diferenciarse e inspirarse, Chang-Say admite que aún se hace muy poco diseño nacional.

Y esto no solo lo dice Chang-Say. Sobre la próxima presentación del Cite Diseño, Madeleine Burns, directora nacional de artesanía del Mincetur, dice que el diseño ayuda al producto a contar una historia. "Si al torito de Pucará le das un lindo empaque, con una presentación que cuente una historia podría mostrar un concepto de estilo de vida peruana", añade.

BELLEZA Y FUNCIONALIDAD

Desde que egresó en 1992 de la Universidad Católica, Ricardo Geldres, dueño de la marca Rika, supo que en el mercado había mucho "arte utilitario". Es decir, había propuestas de objetos con acabados distintos pero con un mismo diseño. Entonces, en su búsqueda por encontrar ese toque diferenciador, comenzó a hacer diseños de puestos y espacios (como la casa embrujada en la Feria del Hogar). Luego de especializarse en diseño ecológico (reciclar materiales) en Alemania, ahora aplica esa técnica en sus productos. Tiene dos líneas de trabajo: una de muebles y adornos que con su marca personal (Rika, que expone en la tienda Algo de Diseño en Miraflores), y otra, en la que trabaja con las empresas (diseño de platos y vasos). "Hay que pensar que el usuario del producto es el eje del diseño, por eso para lograr un buen diseño se debe conocer la relación entre el objeto artificial y el ser humano", comenta.

FORMAS DE VANGUARDIA

El diseño industrial es tan antiguo como la prostitución, porque para existir tiene que ir en contra de las normas. Esta es una frase de un gurú del diseño industrial que se le quedó tatuada a Federico Otero, quien acaba de crear a principios de este año la empresa Otero, estudio de diseño. Él decidió emprender su negocio luego de haber estudiado la carrera en el Perú y en EE.UU. y luego de haber trabajado en estudios de otros profesionales extranjeros diseñando relojes, lámparas, grifería en empresas foráneas líderes en dichos rubros. ¿Por qué prefirió hacer empresa en el Perú, e vez de seguir trabajando para otros? "Creí que ya estaba preparado para tener lo mío", responde Otero, ingeniero industrial de 31 años. Además, él quiere desarrollar su empresa "a escala global", es decir, seguir haciendo trabajos de productos para el extranjero (relojeras, empaques, lámparas) y, a la vez, hacer contacto con empresas locales.

Otero explica que el mayor reto radica en hacer notar a las empresas que en estos tiempos el objeto debe ser funcional, bonito y generar emociones. Cuando se le pregunta si estas características hacen que los diseños sean inaccesibles para el sector que tiene pocos ingresos, Otero responde: "la idea no es complacer a una élite, sino llegar a todo el mundo".

De acuerdo con Fernando Pérez "el buen diseño resuelve factores de uso, de fabricación, estudia la percepción y el comportamiento de los consumidores, satisface sus expectativas, impulsa las ventas y asegura el éxito comercial del producto en el mercado". Por ello, en el Perú, algunas empresas ya han optado por tener oficinas dedicadas al diseño de producto.

Por ejemplo, Kike Gómez, diseñador industrial que trabaja en el área de innovación y desarrollo de Exportimo, la mayor exportadora de muebles peruanos, explica que desde hace varios años se ha modernizado el concepto. "Ahora dos diseñadores industriales y un arquitecto de interiores desarrollan el concepto en conjunto", dice. El resultado es un mueble bonito y funcional que puede ser fabricado con las máquinas que se tienen a disposición. Y como la marca vende innovación, la empresa hace 160 modelos nuevos al año y fabrica lotes de cinco unidades por diseño.

Claro, para lograr esto, como dice Fernando Pérez, se requiere invertir en el diseño, en la investigación de mercado en el desarrollo de producto, en experimentación, innovación y, especialmente, en creatividad.

EN PUNTOS

-Según el estudio El Consumidor Peruano 2007, de Arellano Márketing, si se incrementara un 25% al presupuesto personal, los encuestados preferirían invertir en mejor alimentación y en el mantenimiento de la casa (La muestra fue de 5.300 personas de la zona urbana de las 16 ciudades económicamente más importantes del país).

-Del total de entrevistados, un 19% dijo, en una primera mención, que gastarían en una mejor alimentación y 13%, en el arreglo o mantenimiento de la casa. El 20% de encuestados piuranos y un 21% de iquiteños invertirían en el mantenimiento de su casa como primera opción.

lunes, 22 de marzo de 2010

Vitrina con base iluminada para maniquies de ropa de damas


Maketas para el curso de diseño de tienda y vitrinas en la escuela superior privada ORVAL




stand punto de venta para marca AVON




Pared expositiva para marca rip curl se uso el logo como concepto principal
del diseño y unas formas curva simulando las olas del mar
el punto focal lo pone ese elemento en rojo que conllevar
la marca misma con la tipografia y el logo
el complemento lo forman la ropa y el fondo
con motivos marinos

Mueble para polos y accesorios para marca Rip curl